UNIVERSIDAD DE PIURA RECONOCE A TRABAJADOR ADMINISTRATIVO
Durante 24 años, el silbido de Paulino Lachira se ha dejado escuchar en los jardines de la universidad, mientras se dedicaba a su cuidado. Hoy, se jubila, alegre, porque deja “una obra bien hecha”. Los últimos días han sido emotivos para el personal de la Universidad de Piura. Antes de irse, Paulino Lachira cumplió la meta de pasar por las oficinas de los distintos edificios, para despedirse de los compañeros a los que muchas veces saludó, desde los jardines del campus de Piura, con su característica amabilidad.
Paulino llegó a la UDEP el año 2000, con la misión de ayudar a convertir los espacios del bosque seco en jardines, en pulmones verdes para la comunidad universitaria. Se le asignó el cuidado del local donde funcionaba el Programa de Alta Dirección (PAD), hoy Edificio de Gobierno. “El edificio estaba en un espacio de sol y debía hacer un jardín. Hoy lo veo lindo, verde, con algarrobos y palmeras”, dice contento de haber cumplido su labor.
Fue la doctora Ángela Carrasco, profesora del PAD, quien lo recomendó para venir a la UDEP, por sus habilidades para cuidar las plantas, por su responsabilidad, constancia y entusiasmo con que se encargó, durante 15 años, de los trabajos de jardinería en el Centro Cultural Faro.
Desde niño, Paulino trabajó en el cultivo y cosecha de algodón, junto a su padre, de quien aprendió las cualidades con las que ejerce su trabajo. En la UDEP asumió el reto y lo ha cumplido.